-Detrás de ti.
- ¡Ah! Jajajajaja.
-Mire má, esa caja de mangos nadie se la lleva. No manches.
-Ha de ser de uno de esos diableros. A ver, ve a ver si
están buenos mijo.
Yo me acerco a la caja de mangos, agarro uno y lo
examino mientras acaricio mi barba, pensativo.
-Están buenos, hasta se me antojo uno -le digo a mi abuelita.
- ¿Qué hacemos Haile? -pregunta mi tía.
- ¿Paro un taxi? -sugiero.
- ¿Ya nos vamos má?
- Sí, ya no falta nada.
-Ahí viene uno –digo y le hago la parada.
-Buenos días, ¿me puede ayudar a subir mi caja de mangos? –dice
mi tía señalando la caja.
-Claro –dice el taxista.
Se baja del carro, abre la cajuela, carga la caja de mangos y la guarda. Todo en diez segundos.
Se baja del carro, abre la cajuela, carga la caja de mangos y la guarda. Todo en diez segundos.
-Súbanse jajajaja –dice mi tía riendo.
-Chale, mejor hubiéramos subido nosotros los mangos,
para irme chingando uno jajaja -comento.
Más tarde ese
mismo día, en el microbús de camino al cerro hay unas bolsas en uno de los asientos cercanos al chofer:
-No manches, Haile, ¿ya viste esas bolsas? Llevan todo el
viaje ahí y nadie se las baja. Se les han de haber olvidado.
- ¿Tú crees? –digo y volteo a ver si hay pasajeros-. Hay
mucha gente, ¿no será de alguien?
-Sí verdá –dice mi tía.
(…)
-Ya vámonos Hailesito –me dice.
Yo ayudo a bajar a mi abuelita y a mi tía del micro.
Yo ayudo a bajar a mi abuelita y a mi tía del micro.
- ¿Me puede ayudar a bajar mis bolsas? –le dice mi tía al
chofer señalando las bolsas.
- ¿Qué pasó? Si esas son mías -replica sonriendo.
- ¡Ah! Jajajajaja. Disculpe.
- ¡Chale! –dice mi abuelita.
Y yo río a
carcajadas.
¡La vida es simple y bella!
ResponderBorrar¡Comer mangos o café con pan ;)!
https://youtu.be/3ZIgdr0a07o
La vida se celebra comiendo mangos
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